5 Octubre 2010
ACELERADOR. Ahora sí, el cabildo dejó la mesa puesta para echar a andar formalmente la construcción del campus de la UNAM al sur de la ciudad.
EN CASCADA. En sesión de Ayuntamiento se aprobó la firma de convenio de colaboración con la UNAM, la modificación a la asignación de montos del préstamo, la famosa permuta con los terrenos del empresario Luis García Padilla y la solicitud para el adelanto de participaciones federales.
LA OBJECIÓN. Todo está dispuesto para que hoy al medio día se firme el convenio de colaboración. Hasta ahí todo bien, peeeero entre el festín de aprobaciones, el regidor del Partido Verde Daniel Gómez puso el dedo en la llaga.
DE FAVOR. El edil pidió la intervención del Instituto Municipal de Planeación para precisar los alcances que van a tener los apoyos municipales para la instalación de la UNAM.
CLARITO. Es decir, que se diga a qué se obliga el Municipio en materia de infraestructura, accesos y equipamiento.
MENOS MAL. Y hasta eso que el cabildo azul no hizo mayores panchos y aceptó la moción del Verde. Y la verdad, tiene razón. En materia de apoyos a proyectos de esa naturaleza, los antecedentes obligan a la suspicacia.
MÁS VALE. Porque una cosa son los apoyos que requiere ese campus de la citada casa de estudios y otra muy distinta que luego se pueda pretender tender la camita para favorecer a algún otro proyecto que se vaya a desarrollar más adelante.
LA MULA NO ERA ARISCA. De esta forma, se pretende blindar el acuerdo con la UNAM para que luego no surjan sorpresas.
EN PROCESO. El tema es sensible. Se va a construir un campus universitario y más delantito vendrá un parque industrial y luego seguramente vendrán más proyectos.
SENCILLO. Y del erario no tiene que salir más que lo estrictamente necesario; y eso sólo se logra con un informe detallado de las obras.
RECUERDOS. Del tema del sur, la secretaria del Ayuntamiento Mayra Enríquez sabe mucho, Eran otras circunstancias pero ella fue de las más combativas a la hora de definir claramente los alcances de la inversión de la autoridad cuando aquel proyecto inmobiliario en tiempos de Ricardo Alaniz.
NI HABLAR. Hoy su papel es el de la conciliación, pero por supuesto que sabe de lo que habla el regidor Daniel Gómez; como reza la frase conocida: la mula no era arisca… (Fragmento del artículo)
Miguel Zacarías / El Heraldo
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