Este es un espacio donde colaboradores de Propuesta Cívica Guanajuato reúnen noticias y artículos publicados en medios de comunicación sobre los Consejos ciudadanos de León.

Esta recopilación no es exhaustiva de las notas que aparecen en los periódicos sobre las instituciones donde se insertan los consejeros ciudadanos, sino pretende ofrecer una mirada al trabajo de los Consejos y hacer más visible su ámbito de acción.

Se compromete a ayudar

9 Noviembre 2011

Celina Hernández Rubio es una mujer sencilla y afable, orgullosa de su papel de madre de cuatro hijos de entre 12 y 19 años de edad, pero desde el pasado 6 de octubre, su familia creció hasta multiplicarse por toda la ciudad.
Y es que la nueva presidenta del consejo directivo del DIF Municipal usa ese símil para referirse a su nuevo compromiso, en el que encabezará el trabajo de esta institución dedicada al desarrollo humano y la atención de las familias y grupos vulnerables de León.
Cambia la etiqueta, pero no el escenario, pues en cada uno de los tres últimos años, la vida de Hernández Rubio ha sido aderezada con una responsabilidad distinta.
En diciembre de 2009 se integró al consejo directivo del DIF Municipal, en el que fue nombrada vocal, al año siguiente, su participación en el organismo adquirió un matiz distinto, pues su hija Diana Alejandra Infante fue invitada a ser la reina de la ciudad y la acompañó en todas sus acciones de beneficiencia.
Y si uno se remonta al pasado familiar de esta mujer, la vocación por ayudar a los demás le viene a la señora Hernández desde mucho más atrás, como lo comparte en la siguiente entrevista que ofreció a A.M.

P: ¿Cómo recibió la designación para ser la nueva presidenta del DIF?
R: Con mucho gusto y ganas de trabajar. Con entusiasmo y apoyada por todo un equipo que ya conocía y del que ya formaba parte.

P: ¿Qué le significa trabajar en un organismo dedicado a la familia?
Me siento muy identificada con él. Es como si trabajara con una familia mucho más grande. Trabajo con la mía, una familia pequeña, pero siento que Dios me pide más.

P: ¿Desde cuándo viene esta vocación de ayudar?
En mi niñez, recuerdo a mi papá, don Salvador Hernández, un señor muy generoso que siempre pensaba en los demás. Invitaba a comer a su mesa a las persona que nos apoyaban en el trabajo, por si alguno no había llevado su lunch. Fue ejemplo para toda mi familia de que todos somos iguales. Eso creo, que fue la semillita.
Después, al conocer a mi esposo, José Luis Infante, que también es una persona muy generosa, nos involucramos en un apostolado de catequesis desde hace unos 10 años, en un movimiento en el que participamos familias y cuyo trabajo se identifica mucho con lo que hace el DIF.

P: ¿Qué significa para usted la familia?
Es un regalo de Dios. Es la plataforma más importante de la sociedad; donde nacen y se enseñan los valores, la educación, el amor al prójimo y el respeto a uno mismo.

P: ¿Cuál cree que es su mayor reto al frente del DIF?
Lo primordial ahorita es terminar la remodelación de los cinco centros DIF que nos faltan. Consolidar los programas establecidos y dar a conocer más lo que es la institución y su trascendencia. Es un organismo que cambia familias y personas, y quisiéramos dar más a conocer esa parte.

P: ¿De todos los sectores que atiende el DIF, cuál cree que es el más vulnerable?
La niñez y los adultos mayores. En cierta forma ellos se siente más desprotegidos y queremos que sientan que trabajamos por ellos, que nos preocupan mucho y que estamos poniendo todas nuestras ganas para apoyarlos.

P: ¿En estos años colaborando con el DIF, cuál ha sido su experiencia más memorable?
Hay varias, pero una que tengo muy presente fue en un cierre de terapia de psicología. Ahí dio su testimonio una señora joven que vivió violencia en su casa y acudió a nuestro centro a recibir apoyo, después acudió su esposo que había padecido alcoholismo. Ver cómo fue cambiando su vida paso a paso, cómo se sintió más valorada y querida, y cómo se reflejó eso en sus hijos. Todos nos sentimos muy contentos.

P: El anhelo es que estos cambios de vida cundan.
Definitivamente. Lo más importante es la familia y en lo que necesiten que los apoyemos, ahí estaremos. La gente no debe tener miedo de acercarse a nosotros. Tenemos toda la intención de ayudar y si no está en nuestras manos hacerlo, buscamos la forma. Lo importante es que nos conozcan, todos son importantes para nosotros: desde el niño hasta el abuelito.

P: ¿Cuál de los programas del DIF es su favorito?
R: Todos son especiales, pero diría que los dedicados a los adultos mayores.

P: ¿Cómo tomó su familia esta nueva encomienda?
R: Ayudar nos gusta mucho, ellos son para mí un apoyo muy importante. Somos un equipo que nos apoyamos mutuamente y nos gusta trabajar, estamos contentos. Al decidir “sí”, fue un sí de toda mi familia, de mi esposo y de mis hijos.

P: ¿Cuál es la mayor diferencia entre lo que hacía antes en el DIF y ahora?
R: El trabajo y el compromiso son mayores y debo organizarme más en mis actividades, pero es muy parecido, porque tienes el contacto con las personas y cuando ayudas, tú eres el que más contento te sientes.

P: Finalmente, ¿qué le diría a quienes necesiten del DIF?
R: Confíen en nosotros, acérquense. Tenemos ganas de trabajar, nuestra gente tiene mucha disposición y se está preparando constantemente. Tanto el equipo, como el consejo y el voluntariado, todos trabajamos por dar un buen servicio.


José Luis Meza / a.m.

http://www.am.com.mx/Nota.aspx?ID=509536