Detienen demolición de finca protegida por INAH
19 Abril 2011
Aunque está catalogada como monumento histórico, la finca con el número 103 de la calle Belisario Domínez es derribada por particulares.
De acuerdo a una denuncia ciudadana, cada noche se realizan trabajos de demolición al interior del inmueble.
MILENIO constató que lo único que sigue en pie es la fachada, en donde todavía hay algunas advertencias del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“Obra Suspendida Conaculta-INAH”, se lee en las hojas.
En una cortina permanece el letrero de lo que un día fue el consultorio de un dentista.
Pero a través de las gruesas puertas de madera, que están rotas, se pueden apreciar montones de escombros de lo que un día tuvo valor histórico.
También hay graffitis. Pero adentro ya no hay ni techos, ni paredes, ni nada.
Hace tres años, a principios del 2008, en una visita realizada al Centro Histórico de León, el historiador Felipe Echenique constató que eran cinco los monumentos históricos afectados o derribados en su totalidad por particulares.
El experto visitó el lugar como miembro de la Comisión de Defensa del Patrimonio del Sindicato de Académicos del Instituto Nacional de Antropología, para atender una queja por destrucción de monumentos históricos.
La finca con el número 103 de Belisario Domínguez estaba entre las que eran destruidas por las noches.
El historiador pudo confirmar que de las fincas salían camionetas con escombros y había trabajadores demoliendo los inmuebles.
De acuerdo a la advertencia colocada en las puertas del inmueble, la obra se suspendió debido a violaciones a la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicos, Históricos y Artísticos.
Mariana Nieto / Milenio
http://impreso.milenio.com/node/8946262
Aunque está catalogada como monumento histórico, la finca con el número 103 de la calle Belisario Domínez es derribada por particulares.
De acuerdo a una denuncia ciudadana, cada noche se realizan trabajos de demolición al interior del inmueble.
MILENIO constató que lo único que sigue en pie es la fachada, en donde todavía hay algunas advertencias del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“Obra Suspendida Conaculta-INAH”, se lee en las hojas.
En una cortina permanece el letrero de lo que un día fue el consultorio de un dentista.
Pero a través de las gruesas puertas de madera, que están rotas, se pueden apreciar montones de escombros de lo que un día tuvo valor histórico.
También hay graffitis. Pero adentro ya no hay ni techos, ni paredes, ni nada.
Hace tres años, a principios del 2008, en una visita realizada al Centro Histórico de León, el historiador Felipe Echenique constató que eran cinco los monumentos históricos afectados o derribados en su totalidad por particulares.
El experto visitó el lugar como miembro de la Comisión de Defensa del Patrimonio del Sindicato de Académicos del Instituto Nacional de Antropología, para atender una queja por destrucción de monumentos históricos.
La finca con el número 103 de Belisario Domínguez estaba entre las que eran destruidas por las noches.
El historiador pudo confirmar que de las fincas salían camionetas con escombros y había trabajadores demoliendo los inmuebles.
De acuerdo a la advertencia colocada en las puertas del inmueble, la obra se suspendió debido a violaciones a la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicos, Históricos y Artísticos.
Mariana Nieto / Milenio
http://impreso.milenio.com/node/8946262
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Consejo Centro Histórico